
"Ayer era inteligente, así que quería cambiar el mundo.
Hoy soy sabio, así que me estoy cambiando a mí mismo”
Yalāl ad-Dīn Muhammad Rūmī.
¿De qué se trata el Coaching ontológico?
El coaching ontológico es un enfoque de desarrollo personal y profesional que se centra en la transformación del ser humano a través del lenguaje, las emociones y la corporalidad. A diferencia de otros tipos de coaching, el ontológico se basa en la premisa de que nuestra percepción del mundo está profundamente influenciada por nuestras interpretaciones y creencias. La verdad no es una y absoluta, cada quien construye su realidad a partir de sus valores y su forma de interpretar los eventos de su vida. Los valores condicionan interpretaciones y las interpretaciones refuerzan creencias. Los coaches ontológicos trabajamos con nuestros consultantes para identificar y desafiar estas interpretaciones, ayudándoles a expandir su capacidad de acción y así lograr resultados más efectivos en sus vidas. Es importante mencionar que no solo buscamos alcanzar objetivos específicos, sino también fomentar un cambio integral en la percepción y la forma de ser del consultante, promoviendo un mayor bienestar y autoconocimiento. Los coaches ontológicos tenemos la labor de indagar, por medio de preguntas orientadas a generar un pensamiento crítico y una valoración profunda de los valores, interpretaciones y creencias que condicionan la forma de ser del consultante. Luego, además de indagar, acompañamos en el proceso de exploración y transformación que idealmente se da tras la etapa de exploración. En una sesión, todo esto ocurre de una forma fluida, empática y respetuosa. Ante todo eso: empatía y respeto; de otro modo, no hay buen coaching.
Diferencias con la psicoterapia
A diferencia de las múltiples técnicas de la psicoterapia, el coaching ontológico se basa en indagaciones orientadas hacia el futuro. En el coaching no indagamos sobre el pasado, excepto cuando es altamente relevante para los objetivos planteados por el consultante. No buscamos explicaciones, en el pasado, de lo que somos, sino que analizamos a profundidad ‘ese’ o ‘esa’ persona que somos en el presente. De igual forma, los coaches ontológicos no damos respuestas ni diagnósticos. Vaya, en principio, ni siquiera damos opiniones. El consultante es quien tiene la capacidad y la responsabilidad de embarcarse en un viaje de autoanálisis y autoexploración; nosotros estamos para propiciar ese viaje, y, luego, guiarlo y acompañarlo. En coherencia con lo anterior, vale aclarar que en el coaching ontológico no trabajamos con trastornos, desórdenes o síndromes psico-emocionales (típicamente llamados psicopatologías) que requieren de un tratamiento más invasivo, pues en teoría* estas no son condiciones de las que los pacientes o consultantes puedan salir por sí mismos por medio de un trabajo de autoanálisis y autoexploración. * Digo ‘en teoría’ porque en psiquiatría y psicología existe aún cierta tendencia a patologizar condiciones perfectamente congruentes con la experiencia humana en el contexto de complejidad en que vivimos.
Mi enfoque y propuesta
Mi enfoque como coach ontológico se distingue por mi formación como socióloga, mi experiencia como docente y mi habilidad de escritora. Este conjunto de habilidades y experiencias me permite ofrecer una perspectiva única, combinando el análisis sistémico con un enfoque personalizado. Mi formación y experiencia en investigación potencia mi pensamiento analítico, mientras que mi habilidad como escritora de ficción es un recurso valioso que me permite trabajar contigo en la coherencia de tu narrativa personal, impulsándote a descubrir tu autenticidad.
¡Qué aplicaciones tiene el Coaching ontológico?
El coaching ontológico tiene una amplia gama de aplicaciones, tanto en el ámbito personal como profesional. Aquí te presento algunas de las más destacadas: En el ámbito personal: - Ayuda a las personas a tomar conciencia de sus creencias, valores y emociones, lo que les permite identificar patrones de comportamiento limitantes y generar cambios positivos. - Facilita el autoconocimiento y la exploración de nuevas posibilidades, lo que contribuye a una vida más plena y satisfactoria. - Fortalece la capacidad de afrontar desafíos y superar obstáculos, desarrollando la resiliencia y la confianza en uno mismo. - Mejora de las relaciones, al promover la comunicación efectiva y la empatía. Lo anterior puede ayudar a fortalecer los vínculos interpersonales, a resolver conflictos y a construir relaciones más saludables y armoniosas. - Ayuda a clarificar metas y definir planes de acción concretos para alcanzarlas. - Es igualmente útil para la superación de las barreras internas que impiden el progreso, como el miedo al fracaso o la falta de motivación. En el ámbito profesional u organizacional: - Podemos trabajar en el desarrollo de habilidades de liderazgo transformacional, inspirando y motivando a los equipos. Esto mejora la capacidad de toma de decisiones y la gestión del cambio, y fortalece la comunicación y la construcción de relaciones de confianza con los colaboradores. - Fomenta la colaboración y la sinergia entre los miembros del equipo. - Facilita la adaptación a los cambios y la transformación cultural de las empresas. - Puede ayudar va mejorar el clima laboral y la satisfacción de los empleados. - Es una herramienta útil para mejorar la comunicación entre los empleados, los gerentes y los clientes. Como podemos ver, el coaching ontológico es una herramienta poderosa que puede aplicarse en diversos contextos para generar cambios positivos y alcanzar el máximo potencial tanto a nivel individual como colectivo.